Come, bebe y explora la ciudad de Krefeld, situada en la región occidental de Alemania.
Conocida como la ciudad de la seda y el terciopelo, Krefeld es el centro de la industria textil alemana. En el Museo Textil Alemán y el Museo de la Seda, podrás descubrir la historia única de esta zona. En septiembre, la ciudad organiza una serie de espectáculos de moda para presentar los tejidos más recientes y, en abril, se celebra el Festival Medieval del Lino.
La ciudad está dividida en tres barrios muy característicos: Krefeld, Linn y Uerdingen.
Linn es una pequeña aldea medieval situada junto al río Rin. El castillo de Burg Linn es su punto de referencia. Esta fortaleza se construyó en el siglo XII y es una visita indispensable. Cruza el foso para explorar el museo situado dentro del castillo. Es fácil perderse en el pasado mientras exploras sus distintas salas.
Uerdingen también se encuentra junto al Rin. Esta antigua ciudad quedó arrasada durante la Guerra de los Treinta Años y se reconstruyó con la arquitectura barroca que la caracteriza actualmente.
Krefeld se fundó como un campamento militar durante la época del Imperio romano. Allí se llevó a cabo la infame batalla de Krefeld durante la Guerra de los Siete Años. Actualmente, la escena artística de la ciudad es muy activa. No olvides visitar Haus Lange y Haus Esters, dos edificios diseñados por el famoso arquitecto Ludwig Mies van der Rohe. Ambos son en la actualidad museos de arte contemporáneo con una impresionante colección de obras de todo el mundo.
Krefeld está repleta de espléndidos parques situados en la orilla del río. Entre ellos se encuentra el famoso Jardín Botánico, un lugar ideal para pasar la tarde. Elfrather See es un impresionante lago que limita con la ciudad y en el que encontrarás barcos de alquiler para navegar, y podrás practicar windsurf o remo.
La ciudad también tiene una animada vida nocturna. Deja algo de espacio en el estómago para todos los bares y restaurantes que invaden las calles. La especialidad de Krefeld son los platos tradicionales y las cervezas locales, que te harán vivir una auténtica experiencia culinaria alemana. Los amantes de la música no pueden perderse Kulturfabrik y Kulturrampe, dos animados locales que atraen a algunos artistas famosos.
Si buscas una oferta de viaje a Krefeld, verás que esta ciudad está muy bien comunicada. Se encuentra a menos de 25 kilómetros del Aeropuerto Internacional de Düsseldorf. Se comunica con el resto de ciudades alemanas mediante las líneas ferroviarias y carreteras principales, lo que la convierte en una parada emocionante y accesible durante un viaje por Europa.