El primer mercado de esclavos de Europa, llamado sencillamente Mercado de Esclavos, es un museo que arroja luz sobre la compleja relación histórica de Portugal con la esclavitud. Este mercado se construyó en 1444 y en él se exponían a los hombres y mujeres que se capturaban y transportaban desde la costa occidental de África para venderlos como esclavos. Las impactantes muestras que puedes visitar describen el tratamiento atroz al que se sometía a estas personas que se vendían a familias de toda Europa.
El museo actual, con elegantes arcos y ventanas, se construyó en el siglo XVII como sede de aduanas y del capataz real. En las distintas placas informativas se ofrece información sobre el primer mercado de esclavos de Europa.
Este mercado fue un sector muy lucrativo para la monarquía portuguesa y los comerciantes del país en aquella época. Durante el recorrido, pasarás junto a la estatua del príncipe Enrique el Navegante, quien desempeñó un papel clave en el desarrollo del comercio de esclavos en Portugal y recibía una comisión por cada una de las ventas.
En las secciones de este fascinante museo verás las distintas reliquias y artefactos que se han conservado de esta terrible era. También podrás consultar detalles sobre el deplorable tratamiento que se daba a los esclavos, a quienes se separaba de sus familias y se mantenía en condiciones pésimas.
Quizá quieras comprar el pequeño libro informativo para profundizar en este episodio histórico. Las mujeres esclavas se veían obligadas a vender alimentos y carbón en los mercados callejeros, mientras que los hombres tenían que hacer trabajos exigentes como barrer, pescar y transportar cargas pesadas. Se estima que los esclavos constituían aproximadamente una décima parte de la población del Algarve en el siglo XVI.
Hay que pagar para acceder al museo, que abre a diario desde la mañana hasta la tarde, excepto los lunes de verano. El horario en invierno varía un poco más.
El Mercado de los Esclavos se encuentra en la plaza Infante D. Henrique, en la mitad sur del centro histórico de Lagos. Está situado unos metros al oeste del puerto, en el lado norte del Jardín de la Constitución. Aprovecha para visitar otros lugares de interés de la zona, como la iglesia de San Antonio, el frente del puerto y la puerta de San Gonzalo.