Cheyenne te recibirá con los brazos abiertos en cualquier época del año. Llamada así por la tribu de las Grandes Llanuras de los nativos americanos de etnia cheyenne, la capital del estado de Wyoming se fundó en 1867 en el lugar en el que el ferrocarril transcontinental cruzaba la serpenteante vía marítima de Crow Creek. Cheyenne surgió prácticamente de un día para otro y ha sido un hervidero de actividad desde entonces.
Aprovecha los viajes baratos a Cheyenne y empápate del sol de Wyoming en el gran jardín botánico del parque Lions, que abre todos los días y en el que no hay abonar ninguna entrada. Llévate la comida contigo y pasea por el lago Sloan para observar la diversa fauna de las altas llanuras. Haz una parada en Children’s Village para vivir una aventura familiar en un apasionante parque lleno de paisajes interactivos, un teatro de marionetas y esculturas. Puedes visitar esta aldea infantil de martes a domingo.
Explora el Old West Museum para conocer el patrimonio pionero de Cheyenne y ver divertidas exposiciones cualquier día del año. Visita la mansión Nagle Warren y pon la guinda a tu tarde tomándote un té inglés, que se sirve los viernes y los sábados en un completo atuendo victoriano.
También puedes participar en una búsqueda del tesoro para encontrar todas las famosas Big Boots de Cheyenne. En estas enormes botas de vaquero de dos metros de altura, repartidas por toda la localidad, se representa la historia de Cheyenne con pinturas de artistas locales.
Cheyenne sigue manteniendo su pasado de vaqueros y forajidos con el festival anual Cheyenne Frontier Days, una celebración de diez días de duración en homenaje al Lejano Oeste que empezó como exhibición de rodeo en 1897. Busca paquetes de vacaciones en Cheyenne para la última semana de julio y disfruta del evento “Daddy of ‘em All” con los lugareños, además de disfrutar de conciertos, rodeos, desayunos con tortitas al estilo campero, un desfile y mucha diversión para toda la familia.
Es muy fácil llegar a Cheyenne en coche al estar en el cruce de dos autopistas interestatales. El Aeropuerto Internacional de Denver queda a hora y media en coche y en él aterrizan numerosas aerolíneas. En el centro de Cheyenne hay un cómodo sistema de autobuses locales. La zona tiene veranos cálidos y atracciones todo el año, pero prepárate para pasar frío en invierno y tener nevadas hasta los meses de marzo y abril.
Cheyenne te invita a “vivir la leyenda”. Explora su colorido pasado y disfruta de la gran hospitalidad que ofrece actualmente.