Bodrum, uno de los sitios con mayor patrimonio histórico del planeta, alberga de una de las siete maravillas del mundo antiguo. Por toda la ciudad encontrarás museos, excavaciones arqueológicas y monumentos antiguos. Además, es un importante destino turístico cuyos hoteles de playa atraen a miles de visitantes cada año. Déjate maravillar por lujos modernos y las maravillas antiguas de esta ciudad del mar Egeo.
Hace más de dos milenios, Bodrum era la ciudad griega de Halicarnaso. En el siglo IV a.C. se construyó una tumba de aproximadamente 50 metros en honor al rey Mausolo, que más tarde se convertiría en una de las siete maravillas del mundo. Recuerda visitar las ruinas del mausoleo de Halicarnaso para observar una maqueta a escala de la tumba de mármol junto con muchos restos de sus columnas y relieves.
El castillo de Bodrum se sitúa en una península al sur de la ciudad. Deberás pagar por entrar a esta estructura del siglo XV construida por los cristianos, en gran parte con piedras extraídas del mausoleo en ruinas, pero es una visita que merece la pena. Hoy en día, el castillo aloja el Museo de Arqueología Submarina, que exhibe reliquias bien conservadas procedentes de excavaciones y naufragios de toda la zona.
En las colinas del norte de la ciudad encontrarás más monumentos antiguos. Disfruta de un concierto en el anfiteatro del siglo IV a.C. o sube a la única parte que sobrevive de la muralla de Halicarnaso en la puerta de Mindos.
Podrás pasar un día disfrutando del mar Egeo. Camina a lo largo de la extensa playa de la bahía de Gumbet, o aventúrate a nadar en las playas protegidas de la pequeña playa de Bardakçi, con sombrillas y tumbonas del complejo turístico cercano. Reserva una excursión de buceo y sal explorar las aguas locales, donde podrás ver peces de colores, restos de naufragios e incluso restos de aviones.
Busca una oferta para viajar a Bodrum durante los meses templados, que incluyen desde noviembre hasta abril, cuando el clima es más agradable. Puedes llegar fácilmente a Bodrum en avión al Aeropuerto de Milas-Bodrum, a 33 kilómetros al norte de la ciudad. Todos los días llegan vuelos desde Estambul. Cuando aterrices, la forma más cómoda de llegar a la ciudad es en taxi. Aunque muchas de las atracciones históricas cierran los domingos, las playas siempre permanecen abiertas.