Recorre la Albertina, una de las mayores colecciones de pinturas originales del mundo, con obras que van desde el Gótico hasta la actualidad. La importante colección explora el cambio de estilos durante un periodo de 130 años, e incluye obras de Monet y Picasso, así como trabajos de artistas más más modernos, como Warhol o Klimt. Las exposiciones temporales son de una calidad inigualable. Es posible además recorrer las salas imperiales de una de las hijas de la emperatriz María Teresa.
Ubicada en el ala sur del Palacio Imperial, la colección Albertina fue fundada en 1776 por el duque Alberto de Sajonia-Teschen, yerno de la emperatriz del siglo XVIII, María Teresa. Actualmente, sus exposiciones permanentes, como la perteneciente al periodo que va de Monet y Picasso, contienen solo una parte de la colección, que abarca un millón de grabados y 60 000 dibujos. El resto de las obras se van mostrando a períodos en las excelentes exposiciones temporales.
Entre las obras maestras de los grandes pintores europeos destacan los estudios de niños realizados por Rembrandt, los estudios de mujeres de Klimt, el audaz arte pop de Warhol, el “Retrato de una niña” de Renoir y el “Estanque de nenúfares” de Monet. Pero la Albertina cuenta con trabajos de otros grandes nombres, desde Leonardo Da Vinci, Rafael o Miguel Ángel hasta Picasso, Cézanne, Schiele o Kokoschka. Podrás comprobar el cambio de estilos desde el impresionismo francés hasta el modernismo, pasando por el expresionismo alemán.
También podrás recorrer los Salones de los Habsburgo. Estos coloridos salones con tallas de madera doradas y suelos de parqué contienen muebles de la época en la que servía de residencia a Maria Cristina, hija de María Teresa.
Admira también las colecciones de arquitectura y fotografía, así como los espacios para exposiciones temporales. Después puedes visitar la cafetería y restaurante del museo en la planta baja para deleitarte tomando algo en el elegante ambiente de la Albertinaplatz de Viena.
La Albertina abre todos los días, excepto en Navidad y Año Nuevo, y el miércoles tiene un horario prolongado por la tarde. Se encuentra en el centro de Viena y es de fácil acceso en transporte público. La entrada es de pago y, con un pequeño suplemento, es posible alquilar una audioguía.