Entre las zonas más sagradas de la Isla de Pascua, Ahu Akivi destaca por sus grandes cabezas de piedra, las moai. Las siete esculturas, de igual tamaño y forma, están dispuestas en una hilera que mira al océano. Déjate sorprender por el tamaño de estas gigantescas tallas de toba volcánica.
Gracias a ellas, los historiadores han podido descubrir mucho sobre las capacidades científicas de los rapa nui, sobre todo por la relevancia geográfica de su ubicación. Descubre tú también las teorías que rodean este lugar misterioso, cuyo origen se remonta al siglo XVI.
La mayor parte de los moais de la isla miran hacia el interior, hacia un asentamiento o una aldea, y se cree que representan a venerados antepasados y líderes de los rapa nui. Como comprobarás, las estatuas que nos ocupan no miran hacia el interior, sino hacia el mar. Este detalle ha dado lugar a la teoría de que, en este caso, las figuras representan a los siete primeros exploradores rapa nui que llegaron a la isla, que miran hacia el mar buscando la tierra que los vio nacer.
La ubicación precisa de las esculturas también nos ofrece información sobre las personas que las crearon, ya que miran al atardecer durante el equinocio primaveral y dan la espalda a la salida del sol en el de otoño. Se trata del único lugar de la isla donde se le daba esta importancia a la astronomía, por lo que se cree que podrían haberse utilizado como observatorio para establecer las fechas.
Llévate fotos de las expresiones serias de estas estatuas, situadas sobre una plataforma larga y estrecha. Se esculpieron a partir de roca volcánica y cada una de ellas tiene una altura de cinco metros. La anchura total de la hilera es de 70 metros.
Te recomendamos quedarte hasta el atardecer, cuando las gigantescas cabezas se convierten en siluetas oscuras recortadas contra el cielo dorado. Mientras la luna se instala en el cielo, intenta imaginar qué debía ocurrir aquí mismo hace cuatro siglos.
Ahu Akivi se encuentra en el sureste de la Isla de Pascua, a cinco kilómetros hacia el interior desde la zona costera septentrional de Hanga Roa. El trayecto desde Hanga Roa es de unos 20 minutos. También puedes ir caminando desde allí. No se tarda más de una hora.