Qué ver en Santorini, la más famosa de las islas griegas

“Sí, es cierto que Santorini es, junto a Mykonos, una de las islas griegas más famosas y visitadas de todas las que hay. Y son muchas, pues se trata de un espectacular mosaico de más de 2000 islas, de las cuales, tan solo, unas 200 están habitadas.

También es cierto que la isla es uno de esos destinos más deseados por todos los viajeros del mundo. A pesar de ello, no seremos nosotros quienes te digan que no vayas a Santorini, de hecho, puedes viajar en temporada baja y disfrutar de la isla de otra manera. Nosotros también fantaseamos con sus encaladas fachadas, sus puertas azules, una siesta mediterránea en un precioso hotel y degustar las maravillas de la gastronomía griega frente al enorme y azul mar.

Vamos recomendarte una visita a la isla de una forma un poco diferente. Una en la que los puntos calientes de Santorini puedan respirar y que tú no tengas que hacer 3 horas de cola para ir a ese mirador en el que esperas ver ese atardecer exacto. Créenos, en Expedia te vamos a hablar de qué hacer, qué ver, pero también de cómo ser turista en Santorini, sin ser “ese turista”.

Suponemos que lo que te lleva hasta Santorini es, en primer lugar, y por encima de todo, la famosa y repetida estampa de su espectacular atardecer. Si no quieres privarte de ir a vivir la experiencia, aunque no vayas a ser la única persona en el lugar, entonces, dirige tus pasos hacia la localidad de Oia, en el norte de la isla.

Para poder vivirla auténticamente, lo mejor es llegar muy temprano, antes que el resto, y quedarte hasta después del atardecer, cuando la mayoría de visitantes ya han comenzado el éxodo de entre sus calles.

Oia es esa preciosa localidad con la que soñabas. La de la famosa cúpula azul, los peldaños, las entramadas callejuelas, la de la belleza mediterránea. Aunque suene a tópico típico, piérdete por sus calles, sube hasta las ruinas del antiguo castillo, desde allí podrás contemplar el esplendor de Oia, molinos incluidos. Para comer, busca el Armeni, tendrás que subir unos cuantos escalones, pero una vez superado este -no tan- agotador trámite, es hora de disfrutar de un buen plato de pescado del día y de las inmejorables vistas al mar que tendrás desde allí.

Llegada la hora del atardecer, recuerda ir con tiempo a tu cita con el mirador, abre bien los ojos y disfruta del espectáculo del arrebol sobre ti. Recuerda, también, marcharte después que el resto.

Si, por otro lado, quieres investigar qué ocurre si ves la caída del sol desde otro punto de la isla, te recomendamos una opción alternativa, bajando hasta el saliente sobre el que se sitúa el faro, al norte de Oia. Allí, en ausencia de la típica postal, la tranquilidad hará acto de presencia y podrás contemplar cómo el mar engullo al astro rey, un día más.

A estas alturas, te estarás preguntando dónde has de dirigirte para probar esas recetas griegas tan mediterráneas que un viaje de este calibre promete. Para saciar el hambre y hacer un buen viaje gastronómico, te recomendamos que pongas rumbo a Fira, una localidad que reposa sobre un impactante acantilado, a más de 260 metros de altura. Desde allí, podrás contemplar el volcán sumergido. Fira, que es la capital de la isla, por otro lado, vive por y para el turismo.

La ciudad de Fira es otro de esos típicos pueblecitos de las Islas Cícladas. La mayoría de sus edificios fueron construidos en época de invasión veneciana y, en sus calles, se puede aún comprobar ese legado.

El Parea Restaurant te esperará allí, en las calles de Fira. Y estás de suerte, pues es uno de los restaurantes mejor considerados de la isla. Un clásico con terraza con vistas al mar y que está especializado en comida mediterránea tradicional en el que priman los productos locales de gran calidad.

Ya que estás allí, aprovecha para ir en busca de un mejor conocimiento de la cultura de la isla y dedícale un rato a realizar una visita al Museo Arqueológico en el antiguo asentamiento minoico de Akrotiri.

También en Fira podrás ser testigo de un fabuloso atardecer, no toda la gloria se la va a llevar Oia. Además, el de la capital promete ser también especial, pues tendrá lugar sobre la caldera de un volcán y sin tanta gente a tu alrededor.

Para ello, te recomendamos que te dirijas al Volkan on the Rocks, un café que se asoma al borde del acantilado y que cuenta con una gran pantalla en la que se proyectan películas, una vez el sol ha terminado su función y ha llevado a cabo su espectacular salida del escenario. Podrás acompañar el evento con vinos y cervezas locales en este agradable establecimiento que, por alejado del centro, no recibe tanto flujo de visitantes.

Como te decíamos, Santorini es uno de esos lugares del planeta en el que casi todo el mundo tiene puesto el ojo, solo hay que dirigir la mirada hacia los lugares correctos para descubrirla de otra manera.

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