El Teatro Nacional de Croacia es toda una obra maestra de la arquitectura, además de un centro cultural de renombre internacional. Muchos de los cantantes de ópera más famosos del mundo se han subido a sus escenarios, que también han visto bailar a los mejores profesionales de ballet desde su inauguración hace más de un siglo. Además de maravillarte con su majestuosa fachada, deberías animarte a adquirir entradas y disfrutar de sus excelentes espectáculos. Si lo prefieres, también puedes realizar una visita guiada por sus diferentes salas y admirar su exquisita decoración.
FerdinandFellner y HermannHelmer fueron los arquitectos vieneses que se encargaron del diseño de este imponente teatro. Estos también son los que firmaron el diseño de otros edificios importantes, como el Pabellón de Arte de Zagreb y el Akademietheater de Viena. Su inauguración se llevó a cabo en 1895 de la mano del emperador austrohúngaro Franz Joseph I. Durante la ceremonia, el emperador golpeó, a modo de acto simbólico, un bloque con un martillo de plata, lo cual daba por finalizado el proceso de construcción del teatro. Acércate al Museo de la ciudad de Zagreb para ver ese martillo, pues se exhibe allí.
Al admirar la majestuosa fachada de este edificio, fíjate en la escultura de bronce que se erige en frente. La obra del genial artista croata del siglo XX, Ivan Meštrović, conocida como el Pozo de la vida, representa a varias figuras humanas que se abrazan alrededor de un pozo central. Se considera una de las mejores obras de este escultor de prestigio internacional.
No hay mejor modo para disfrutar de la magnífica decoración del auditorio de este teatro que presenciar alguno de sus excelentes espectáculos o participar en una visita guiada. Las visitas guiadas se organizan con actores del teatro y te ofrecen un interesante recorrido por el edificio, donde podrás ver rincones escondidos que raramente verías como espectador, tales como los vestuarios, los estudios o los talleres.
Te fascinará saber que en ese mismo teatro estuvieron en su día artistas de la talla de Franz Liszt y Richard Strauss, entre otros muchos compositores famosos. Dirige tu mirada hacia el techo del auditorio y contempla la magnífica pintura que realizó el artista vienés Alexander Demetrius Goltz. El escenario también es una obra en sí mismo. Dispone de ocho cortinas diferentes que se han confeccionado a mano, cada una de las cuales dispone de detalles particulares y se utilizan para espectáculos y ocasiones especiales.
El Teatro Nacional de Croacia se encuentra en el corazón de Zagreb, a escasos diez minutos a pie de la plaza Bana Jelačića. Si bien puedes contemplar su magnífica fachada en todo momento, lo ideal es adquirir entradas y disfrutar de sus excelentes espectáculos y visitas guiadas para admirar su interior. Para llegar al teatro, coge el tranvía hasta la parada de Rooseveltov Trg.
