El Museo Fabergé de Baden-Baden recuerda la majestuosidad de la Europa anterior a la Guerra a través de las creaciones artísticas de uno de los joyeros más famosos de la historia. El museo, que se creó a partir de la colección personal de un fanático de estas obras, cuenta con una enorme selección de objetos, accesorios y piezas clave del artista. Descubre las obras de un hombre que empleaba piedras preciosas, oro y plata para crear obras de arte extravagantes para la alta sociedad.
Carl Fabergé fue un famoso joyero que diseñaba objetos exquisitos para los dignatarios europeos de finales del siglo XIX y principios del XX. Entre sus creaciones más famosas se encuentran los 50 huevos imperiales que fabricó para los zares de Rusia. Contempla más de 700 piezas del artista en uno de los pocos museos del mundo dedicados a su obra.
Examina la belleza astronómica del Huevo de pascua de la constelación imperial, diseñado para la emperatriz Alejandra en 1917. Esta esfera real de color azul está cubierta de diamantes, que representan las estrellas, y rodeada por un anillo circular dorado. Fíjate en el pedestal: es una pieza de cristal con forma de nube.
Aunque el nombre de Fabergé suele estar asociado a los huevos adornados con joyas, este artesano también fabricó muchos otros objetos, gran parte de los cuales se muestran en el museo. Aquí encontrarás decantadores de plata con forma de liebre, broches de oro con diamantes y delicados botones. No te pierdas la colección de elegantes pitilleras.
También verás cuadernos y bocetos del artista que permiten echar un vistazo a su vida y su arte. En otras zonas del museo puedes ver las obras de otros joyeros famosos, como Cartier y Bolin, y conocer la historia de la joyería en Europa durante las décadas anteriores a la Primera Guerra Mundial.
El Museo Fabergé está en el centro de Baden-Baden, a un par de minutos a pie del spa de Caracalla. Hay una zona de estacionamiento de pago en la misma calle del museo. El museo abre todos los días, con excepciones en las fiestas navideñas. Los adultos deben pagar la entrada. Los niños menores de 12 años entran gratis.