Los jardines botánicos de Moscú, también conocidos por el nombre de Jardín Botánico Principal de la Academia de Ciencias de Rusia, forman parte de la ilustre tradición botánica del país. La propia capital tiene cinco jardines botánicos, y en todo el país hay más de 80 jardines de este tipo o instituciones similares. No dejes pasar la oportunidad de visitarlos en tu viaje a Moscú, pues son los más grandes y famosos de toda Rusia.
Aunque estos jardines se crearon en 1945, esta zona de la ciudad cuenta con una larga tradición botánica. El Jardín de los Boticarios, situado cerca del jardín botánico principal, se fundó en el siglo XVII con la esperanza de encontrar curas para diversas dolencias. Estos jardines, que abarcan 360 hectáreas de terreno, son desde hace mucho tiempo un imán para los iniciados en botánica. Descubre las curiosidades hortícolas que han llegado recientemente a la capital rusa.
Explora durante una hora o dos este aromático oasis y asegúrate de visitar el jardín de las rosas, considerado por muchos visitantes como un lugar memorable. Con sus cerca de 2.500 especies diferentes de rosas, constituye todo un deleite para la vista. Intenta encontrar la singular Rosa de Bengala, famosa por su color verde.
Aprovecha para darte una vuelta por el jardín japonés mientras estás aquí. Pasear por este jardín creado por el arquitecto paisajista Ken Nakajima y el arquitecto Adachi Takeo es una experiencia verdaderamente genuina. Sentirás la esencia de Japón al caminar entre evocadores pabellones y detalladas construcciones, como una pagoda y puertas hechas de bambú. Admira los 100 tipos diferentes de plantas que se pueden ver aquí, como rododendros, flores de cerezo y arces pintados, todas procedentes de la isla de Hokkaido, en Japón.
Dirígete al invernadero renacentista para seguir viendo plantas exóticas. Las orquídeas y las plantas carnívoras proliferan en el cálido ambiente de este lugar. En el jardín del invernadero podrás contemplar las especies que son demasiado delicadas para aguantar el duro clima de Rusia. Si hace buen día, pasea por el arboreto y mira cómo trepan las curiosas ardillas por los robles.
Para llegar a los Jardines Botánicos de Moscú, coge el metro en la estación Vladykino. Los jardines abren de miércoles a domingo. Aunque no hay que pagar entrada en los propios jardines, en lugares como el arboreto, el invernadero renacentista y en el jardín japonés sí se cobra entrada. El jardín japonés podría estar cerrado al público durante los meses de invierno.