La catedral de Kazán es relativamente pequeña y nueva en comparación con los edificios que predominan en la ciudad, pero su característica fachada de ladrillos rojos y molduras blancas, de estilo neoclásico, la convierte en una de las estructuras más preciadas para residentes y turistas. Descubre la interesante historia que se oculta tras esta iglesia ortodoxa tradicional y admira la magnificencia de los frescos que decoran el interior del edificio.
Además, aquí tendrás la oportunidad de profundizar en la historia eclesiástica. La catedral de Kazán se construyó en el siglo XVII en honor a la Virgen de Kazán, para dar gracias por una victoria miliar sobre el ejército polaco. Durante la guerra contra Napoleón, se celebró un oficio dedicado a la Virgen en esta pequeña catedral, para pedirle que liberara al pueblo de la invasión francesa. Aunque la catedral conseguió sobrevivir a este turbulento periodo, los soviéticos la destruyeron más posteriormente. La catedral de Kazán que podemos ver actualmente es una reconstrucción de la estructura original, que se terminó en 1993.
Es fácil reconocer la catedral desde lejos gracias a su característica forma cúbica y sus llamativos colores. Dedica todo el tiempo que necesites a admirar las distintas y sofisticadas cúpulas, entre las cuales destaca una central y reluciente, de color dorado. De noche, el edificio se ilumina con luces resplandecientes. Unos focos especiales magnifican la luminosidad de la fachada al reflejarse en las cúpulas, lo cual aporta a la estructura un aire de festividad.
Entra a la catedral para ver algunas muestras de iconografía ortodoxa rusa. Una de las obras más famosas es el icono de la Kazanskaya, considerada la protectora del país. Ten en cuenta que deberás guardar silencio y respetar a los feligreses que acuden al lugar para rendir culto.
La catedral limita con la famosa Plaza Roja. Explora esta zona histórica repleta de puntos de referencia de Moscú, como la emblemática catedral de San Basilio, cuya cúpula tiene forma de cebolla, o el solemne cementerio del Kremlin.
La catedral de Kazán abre todos los días y la parada de metro más cercana es la de Okhotny Ryad. El edificio está situado en el extremo norte de la Plaza Roja.