La de Barcelona es una catedral de estilo gótico clásico del siglo XIII. A ella acuden los visitantes para ver la misa tradicional bajo sus altos techos abovedados. Por toda la catedral pueden admirarse artes decorativas del siglo XIV en adelante y en el patio del claustro hay una fuente y ocas. Desde el tejado pueden contemplarse vistas de toda la ciudad. La catedral se conoce también como “La Seu” y lleva el nombre de Santa Eulalia, la patrona de Barcelona.
Se encuentra en el Barrio Gótico de Barcelona, a poca distancia caminando desde Las Ramblas. La fachada se reformó en el siglo XIX en estilo neogótico, con arcos y esculturas. Barceloneses y turistas se reúnen en la plaza que hay frente a la catedral. Está muy concurrida los domingos, cuando las mujeres acuden a bailar la sardana, el baile típico catalán más célebre. Pasea por la catedral para admirar su interior, construido entre 1298 y 1448. La sillería del coro constituye uno de los mejores ejemplos de la arquitectura y ornamentación del gótico catalán. Observa los baldaquines esculpidos, escudos conmemorativos y un relieve pintado.
La cripta de Santa Eulalia se encuentra bajo el altar mayor. Sus restos descansan dentro de un sarcófago ornamentado.
El claustro está rodeado por una serie de pequeñas capillas góticas. Por el patio, donde hay árboles y una fuente, deambulan trece ocas. En Semana Santa se celebra la tradición del “L'ou com balla” o baile de huevo, en la que se coloca un cascarón sobre la fuente y se deja que “baile” en celebración del Corpus Christi.
Bajo la galería del claustro se encuentra el museo catedralicio. En él se exhiben numerosos cuadros y esculturas, algunos de los cuales se remontan al siglo XI. No puedes perderte uno de sus mayores tesoros, una custodia ricamente decorada con joyas.
Puedes coger el ascensor para subir a los tejados de la catedral, donde disfrutarás de vistas panorámicas.
La catedral abre todos los días. Hay horarios de apertura especiales los domingos y festivos. Consulta el sitio web de la catedral para obtener más información. La asistencia a misa es gratuita para los turistas, pero es necesario pagar una pequeña tarifa para ver la sillería del coro y el museo catedralicio y para subir al tejado.
Es fácil llegar a ella en autobús y metro.