El baluarte de Sant Jaume es uno de los siete grandes bastiones que emergen del muro que rodea el barrio ibicenco de Dalt Vila. Dentro de esta impresionante estructura podrás ver exposiciones que muestran la evolución de la tecnología militar en la región a lo largo de los siglos. Una forma fantástica de descubrir la historia militar de la ciudad y la isla que puedes tener en cuenta a la hora de planificar tus viajes a Ibiza.
Entre otras armas, en las exposiciones podrás ver de cerca bombas, pistolas y espadas, junto a placas informativas en las que se explica el papel que desempeñó esta armería en la protección de las murallas de la ciudad. El contenido está organizado de forma temática. Por ejemplo, hay una sección dedicada a la evolución de la pólvora y otra a los cambios que han ido experimentando las murallas.
Mientras examinas las antiguas lanzas y alabardas, puedes comentar las exposiciones con el personal. Los niños lo pasarán en grande tocando las réplicas de las armas, probándose armaduras y yelmos, e intentando levantar las pesadas balas de cañón.
Cuando subas a la terraza del baluarte, fíjate en los cañones que se asoman a la ciudad. En la parte más alta te esperan unas vistas impresionantes del casco antiguo y las montañas, que conforman un telón de fondo incomparable cubiertas del verde oscuro de la vegetación. Este es el momento de sacar los prismáticos o la cámara para no perderte ningún detalle y llevarte un recuerdo imborrable de tu viaje a Ibiza.
El museo del bastión, inaugurado en2008, solo abre al público desde la primavera hasta el otoño. En esta época, puedes visitarlo de martes a domingo, desde la mañana hasta la tarde. En cambio, en invierno solo abre para visitas en grupo organizadas con reserva por teléfono o correo electrónico.
El baluarte de Sant Jaume se encuentra en la esquina sudoeste del casco antiguo amurallado de Dalt Vila, en el centro de Ibiza. Puedes llegar a pie o en autobús (hay varias paradas en los alrededores). Aprovecha para visitar otras atracciones cercanas, como la capilla de Sant Ciriac, el Museo Puget y la plaza Reina Sofía.